El siglo XX se caracterizó por el aumento de la intensidad de las inundaciones en las cabeceras de las cuencas fluviales. Las inundaciones se caracterizan por causar grandes pérdidas económicas en infraestructuras, cambios geográficos en el territorio que provocan cambios en el paisaje o, en el peor de los casos, la pérdida de vidas humanas.
En agosto de 2002 Europa experimentó la inundación más fuerte en los últimos cien años. Las lluvias torrenciales del verano azotaron el norte y el centro de Europa: la República Checa, Austria, Alemania, Eslovaquia, Polonia, Hungría, Rumanía, Croacia y Rusia. En total, en toda Europa alrededor de 250.000 personas se vieron directamente afectadas, los daños se estimaron en 20.000 millones de dólares. En Rusia la zona más afectada fue el sur del país, la región de Stavropol, de Krasnodar y las repúblicas de Karachaevo-Cherkesia y Kabardino-Balkaria, donde murieron 104 personas.
En agosto de 2005 el huracán Katrina golpeó el Golfo de México, causando grandes inundaciones en los estados de EE.UU. de Louisiana, Mississippi y Alabama. Las presas alrededor de la ciudad de Nueva Orleans en Louisiana se rompieron y toda la ciudad se inundó. La mayoría de la población de la ciudad fue evacuada. Esta catástrofe dejó 1.193 víctimas mortales y el daño económico se estimó en 60.000 millones de dólares.
En España, El 7 de agosto de 1996, una intensa tormenta en la cabecera del barranco de Arás produjo una gran riada que arrasó el camping Las Nieves de Biescas, situado junto a la desembocadura de las aguas torrenciales en el río Gállego. Murieron 87 personas y 183 resultaron heridas de diversa consideración, además de contabilizarse numerosos daños materiales.
Estos son algunos ejemplos de inundaciones extremas. Factores como las precipitaciones extremas, el deshielo tardío de la nieve o la sobresaturación del suelo, pueden provocar un aumento de la magnitud de la inundación.
Las previsiones meteorológicas, la modelización de eventos hidrológicos y el control del estado de los ríos, son algunas de las herramientas que contribuyen a la previsión y al seguimiento de estos fenómenos naturales.
Proyecto Risqhydro
Los responsables de las instituciones públicas, sensibilizados por los graves perjuicios que las inundaciones pueden causar, y obligados a intentar prevenir estas situaciones, deciden poner en marcha el proyecto Risqhydro: Red de sensores hidrológicos para la Alerta del Riesgo de Inundación.
Risqhydro, es un proyecto transfronterizo cofinanciado por fondos FEDER, promovido por la Diputación de Lleida, en el que han participado los Consells Comarcals de l’Alt Urgell, Alta Ribagorça, Pallars Jussá, Pallars Sobirà, el Conselh Generau d’Aran, y la Communauté de Communes du Canton de Saint Béat de Francia.
Los responsables de este proyecto internacional, escogieron Smarty River para llevar a cabo la instalación de una red de 32 estaciones hidrológicas y una plataforma web, como servicio de Alerta Temprana del Riesgo de Inundación (SAPI). La red, monitoriza en tiempo real el estado de los ríos y de la lluvia en cabecera de cuenca y ofrece información y avisos a las administraciones, que a su vez trasladan a las poblaciones afectadas por riesgo de inundación de las comarcas catalanas y francesas del pirineo central.
La red Risqhydro, está compuesta por 32 estaciones hidrológicas que integran sensores de nivel del río con tecnología radar de alta fiabilidad y precisión, pluviómetros de intensidad de lluvia; sensores de temperatura ambiental; sensores de humedad relativa; estaciones de sensores para el envío de las mediciones al Cloud; alimentación con energía fotovoltaica; plataforma web social para la consulta y seguimiento de los sensores.
Los beneficios de la red Risqhydro
La red Risqhydro, permite conocer de manera remota y en tiempo real el nivel de los ríos y la precipitación en cabecera de cuenca. Al tratarse de una instalación robusta y de bajo mantenimiento, se pude instalar en aquellos lugares donde se necesite obtener la mejor información objetiva, ofreciendo datos de gran precisión y fiabilidad en las medidas.
Se trata de un proyecto “Llaves en mano”, que incluye las estaciones de sensores, su instalación, las comunicaciones y la plataforma web.
Los costes son muy reducidos si se comparan con las alternativas convencionales de aforo y de medición hidrológica. El impacto coste-beneficio, un aspecto que las administraciones públicas siempre tiene en cuenta, es constatable.
Ofrece información hidrológica y de riesgo de inundación a la población en general adaptada a los canales de información que la tecnología pone al alcance de los usuarios.
La posibilidad de obtener información que permita adoptar decisiones en la gestión de riesgos que pueden afectar a un gran número de personas y bienes, aporta un beneficio social tangible para las instituciones y los los ciudadanos.
El sistema de la red Risqhydro, funciona integrado con el CECAT (Centro de Coordinación Operativa de Catalunya) del departamento de Interior de la Generalitat de Catalunya.
